Los planes técnicos de caza son instrumentos de gestión de los terrenos cinegéticos que garantizan el aprovechamiento sostenible de las especies cazables de Castilla La Mancha. El objetivo de estos planes, obligatorios para todos los terrenos cinegéticos, es compatibilizar el aprovechamiento sostenible de las especies cinegéticas con la conservación de la diversidad biológica.
A partir de los planes técnicos de caza se establecen los criterios de gestión cinegética, debiendo incluir, entre otros datos, el inventario de poblaciones silvestres existentes, la estimación de extracciones o capturas a realizar y la delimitación de una zona de reserva para permitir el refugio y desarrollo de las poblaciones en las que no podrá practicarse la caza ni cualquier otra actividad que afecte negativamente a aquellas.